Señor Director: Le agradeceríamos que nos diera oportunidad de publicar nuestra carta, aprovechando esa libertad de expresión que prevalece en su prestigiado periódico y comentar desde nuestra apreciación sobre las alianzas que la dirección nacional del PRD ha impulsando con el PAN en algunos estados de la República.
Haciendo una reflexión en torno a esos pactos aliancistas, creemos que los dirigentes nacionales han cometido una flagrante falta de respeto a los militantes del PRD y mostrado una total amnesia histórica de la lucha que hemos venido dado en contra de ese binomio partidista PRI-PAN, que de ninguna manera son o tienen afinidad a nuestro proyecto de izquierda. La justificación sin sustento de estas alianzas, de que deben ser “para llegar a 2012, fortalecidos y arrebatarle a los cacicazgos, el poder que tienen en los estados”, consideramos que es una vil patraña. Es una posición acomodaticia, que raya en una ramplonería y simpleza, que sólo corresponde a un pragmatismo y una actitud de derecha, pero no desde la perspectiva de izquierda. No hemos visto en esta posición aliancista con el PAN una argumentación amplia, profunda y precisa, que sostengan elementos de juicio, conceptuales o programáticos, que razonen de fondo por parte de la cúpula del PRD.
La ausencia de consideraciones teóricas mínimas para procesar esas alianzas nos preocupa porque dejan entrever que los más de 400 muertos perredistas, asesinados y ejecutados con Salinas, para esta dirección nacional son amnesia histórica, ya no cuentan, y que los fraudes electorales de 1988 y de 2006, donde millones de mexicanos fuimos agredidos y avasallados por estos dos partidos, hoy también es para esta cúpula perredista borrón y cuenta nueva.
Lo grave del asunto es su total manipulación desde las instancias del partido. Los dirigentes nacionales están actuando como si nosotros fuéramos de su propiedad y sin pudor han metido a todos los perredistas en alianzas pragmáticas y carentes de debate. Se han apoyado incorrectamente en acuerdos del Congreso Nacional de Oaxtepec, Morelos, diciendo que se tienen que aceptar las alianzas con el PAN cuando éstas no fueron aprobadas de esa manera. De ahí, se han basado también para utilizar los consejos estatales y convalidarlas, ignorando por completo al grueso de la militancia del PRD en esos estados.
Desde aquí les preguntamos a Jesús Ortega y Jesús Zambrano, autores intelectuales de esas alianzas: ¿cómo ir juntos a defender el laicismo del Estado donde el PAN mantiene una actitud permisiva hacia el clero, en donde coadyuva para que participe sin cortapisas en la política, desde el púlpito, cuando el PRD reivindica la separación de lo civil con lo religioso? ¿Cómo abordar la inseguridad cuando el PAN piensa y cree que el crimen organizado debe enfrentarse a sangre y fuego, incrementando el presupuesto para la compra de armas y poniendo al Ejército en las calles y el PRD mantiene la perspectiva de que los recursos deben ser para invertir en la mejora de los servicios de salud, educación, ampliar el abanico de oportunidades para los jóvenes, las mujeres y sectores marginados, así como la creación de fuentes de empleo y el desarrollo de la planta productiva?
¿Cómo ponerse de acuerdo respecto a los temas del aborto, el control de la reproducción y diversidad sexual, en donde el PAN los asume como pecados o enfermedades, mientras que el PRD las comprende como derechos del hombre y la mujer, o derechos naturales del ciudadano para decidir por sí mismo? ¿Cómo estar de acuerdo acerca del manejo de nuestros recursos naturales y energéticos, pues mientras los panistas los consideran como fuentes de riquezas para unos cuantos, sean empresarios nacionales e internacionales y cuyo objetivo es explotarlos irracionalmente, y los perredistas mantenemos que son patrimonio del estado, y por lo tanto deben explotarse racionalmente en beneficio de la nación como país independiente?
¿Cómo gobernar un país, un estado o un municipio entre ambos partidos con estas contradicciones, donde además los panistas son defensores a ultranza de la economía de mercado, pero de los grandes capitales, y los perredistas pretendemos que se genere una política pública a favor de las mayorías, incluyendo en esto a empresarios comprometidos con nuestra patria?
Nosotros advertimos en el Consejo Estatal del 21 de marzo que rechazábamos rotundamente esas alianzas con el PAN e incluso con el PRI; por ello, nuestros consejeros apoyaron el punto de acuerdo propuesto por la compañera Selene Vázquez Alatorre y respaldamos la posición política planteada por la compañera Fabiola Alanís Sámano de hacerle un llamado a la dirección nacional a que rectifiquen esa posición aliancista, que va en contra de nuestros principios. No fue una posición personal, sino política de todos los perredistas y consejeros de Michoacán.
Por lo tanto, los comentarios “insanos” y no institucionales de Jesús Zambrano en contra de Fabiola Alanís Sámano muestran un desprecio a nuestras instancias estatales, a la militancia de Michoacán y una total falta de respeto a la lucha de años que hemos dado en contra del PRI y ahora en contra del PAN, que durante los dos años que Leonel Godoy Rangel lleva de mandato han mostrado su total desprecio al Ejecutivo estatal y a nuestro propio partido.
Los dirigentes están obligados a pugnar por la unidad y cualquier indicio de división surgida por ellos, los militantes estamos obligados a exigirles que rectifiquen, como ya lo hizo el Consejo Estatal en Michoacán, o en su caso, debemos pugnar por que renuncien, pues ya no estarían representando ni a nuestro proyecto, ni a la herencia histórica que tenemos como instituto de izquierda.
Debemos impedir que se use en nuestro nombre alianzas y proyectos que van en contra del pueblo. El PRD es de miles, millones de hombres y mujeres de izquierda, que desde la escuela, la fábrica, las calles, el campo y las ciudades, hemos luchado con creces y hemos sufrido bastante por transformar a nuestro país durante décadas. En Michoacán, la democracia y las libertades nos han costado sangre y luchando es como hemos avanzado. Nunca hemos estado en la penumbra o tras bambalinas, estimado Jesús Zambrano; por ello, la calidad moral no está en entredicho.
Llamamos a Jesús Ortega y Jesús Zambrano, si son demócratas, a que expliquen en un pleno del Consejo Estatal de Michoacán sus sustentos políticos para esas alianzas y nos muestren que su posición es la correcta y no usen los medios de comunicación para denostar a los perredistas del estado. Que respeten su jerarquía y la institucionalidad respetando a nuestros órganos estatales y dirigentes de Michoacán. No negamos que aquí tenemos diferencias en el estado, pero no somos ingenuos, porque sí ubicamos perfectamente quiénes son los enemigos de la democracia y de las libertades políticas no sólo del estado, sino de todo el país. Desde la cuna del perredismo, llamamos a cerrar filas para continuar en la lucha por la democracia, la soberanía y las libertades e impedir que nuestro partido lo sigan llevando al despeñadero al aliarse con nuestros “verdugos” históricos. Nosotros le decimos al Consejo Estatal, al Comité Ejecutivo Estatal y a la presidenta Fabiola Alanís Sámano, que tienen nuestro apoyo y no los vamos a dejar solos.
Atentamente: Julio César Andrade, Gonzalo Ayala, María Dolores González, Francisco Zamudio, Miguel Soto, Andrés Hernández, Pablo Ballesteros, José Luis Martínez Tapia, Roberto Zamudio, Gabriel Hernández, Soledad Jacobo Pintor, Florencio Tapia, Marco Antonio Arguello, Teresa Martínez Tapia, Sebastián Silva, Ramón Zirate, Rogelio Advincola, R. Francisco Duarte, María Elena Villaseñor, J. Guadalupe Sosa, Amador Parra, Crispín Vázquez, Benjamín Dueñas, Antonio Avilés, Jorge Valles, Jorge Luis Mora Pérez, Oceanía Hernández, Jerónimo Gutiérrez, Efraín Orozco Nieves, Alejandro Moreno, Betania Morales, Julia Martínez, Margarita Jazmín Reyes, Mariano Mora, Bertha Alisia Ambriz, Pedro Hernández, Miguel Ángel García, Claudia Hernández, Benjamín García, Teresa Meza Salazar, Salomón Meza Gutiérrez, Sandra Alonso González, Guadalupe Sánchez Ibarra, Fabiola Meza Salazar, Evangelina Zavala Mosqueda, Eliazar Ayala, Verónica Meza Morales, Josefina Soria Ayala, Consuelo Morales Hernández, Deysi Rosario Zamora Meza, María Guadalupe Meza Gutiérrez, José Antonio Zarate Alonso, Mary Cruz Meza López, Jorge Soria Ayala, Norma Venegas Contreras, Esteban Ayala Zamora, Leticia Núñez Reyes, Rosa Amelia Morales, Claudia Ivón Ceballos, José Alberto Chávez Gutiérrez, Silvia Verónica Aguirre Ceja, María de Jesús Morales Bermúdez, María Isabel Alcántar Jaramillo, José Gerardo Rodríguez, María Enedina Aguilar Banda, Elisa Gutiérrez García, Juana Ríos Martínez, Rosalía Juárez Vázquez, Hernestina Zamarripa, Rosalba Godínez Juárez, Diego Ramírez Solís, Agustina Delgado Mares, Josefa Esparza Segobiano, Griselda Ortiz Zamarripa, María Guadalupe Canales Mejía, Yolanda Arroyo Godínez, Rosa María Gallegos Raya, Estela Mejía Gaytán, Manuel Salvador Godínez Gallegos, María del Carmen Juárez Lugo, Sergio Antonio Mata Rodríguez, Verónica García Castañeda, María Elena Rivera Ávila, Graciela Uribe Razo, José Antonio Contreras Hernández, María Teresa Hernández García, María de la Luz Lugo Rodríguez, Selene Hernández Velázquez, Héctor Canales Mejía, Martha Elena Muñiz Fontanel, Blanca Estela Uribe Estrada, Julia Cruz, Roberto Juárez Cruz, Miguel Solís, José Gerardo Cervantes, Lidia Olivares, María Magdalena Hernández Barreto, Simón Alvarado García, María Adela Barreto, Alama Aurora Muñoz, Ignacio Muñoz Arroyo, Margarita Godínez Ávila, Silvia Guerrero Vázquez, Mario Muñoz Pérez, Ofelia Cervantes, Josefina Agavo Ríos, Federico González Corrales y Francisco Rodríguez Juárez. Responsable de la publicación: Licenciado Filiberto Gutiérrez Moreno.
Haciendo una reflexión en torno a esos pactos aliancistas, creemos que los dirigentes nacionales han cometido una flagrante falta de respeto a los militantes del PRD y mostrado una total amnesia histórica de la lucha que hemos venido dado en contra de ese binomio partidista PRI-PAN, que de ninguna manera son o tienen afinidad a nuestro proyecto de izquierda. La justificación sin sustento de estas alianzas, de que deben ser “para llegar a 2012, fortalecidos y arrebatarle a los cacicazgos, el poder que tienen en los estados”, consideramos que es una vil patraña. Es una posición acomodaticia, que raya en una ramplonería y simpleza, que sólo corresponde a un pragmatismo y una actitud de derecha, pero no desde la perspectiva de izquierda. No hemos visto en esta posición aliancista con el PAN una argumentación amplia, profunda y precisa, que sostengan elementos de juicio, conceptuales o programáticos, que razonen de fondo por parte de la cúpula del PRD.
La ausencia de consideraciones teóricas mínimas para procesar esas alianzas nos preocupa porque dejan entrever que los más de 400 muertos perredistas, asesinados y ejecutados con Salinas, para esta dirección nacional son amnesia histórica, ya no cuentan, y que los fraudes electorales de 1988 y de 2006, donde millones de mexicanos fuimos agredidos y avasallados por estos dos partidos, hoy también es para esta cúpula perredista borrón y cuenta nueva.
Lo grave del asunto es su total manipulación desde las instancias del partido. Los dirigentes nacionales están actuando como si nosotros fuéramos de su propiedad y sin pudor han metido a todos los perredistas en alianzas pragmáticas y carentes de debate. Se han apoyado incorrectamente en acuerdos del Congreso Nacional de Oaxtepec, Morelos, diciendo que se tienen que aceptar las alianzas con el PAN cuando éstas no fueron aprobadas de esa manera. De ahí, se han basado también para utilizar los consejos estatales y convalidarlas, ignorando por completo al grueso de la militancia del PRD en esos estados.
Desde aquí les preguntamos a Jesús Ortega y Jesús Zambrano, autores intelectuales de esas alianzas: ¿cómo ir juntos a defender el laicismo del Estado donde el PAN mantiene una actitud permisiva hacia el clero, en donde coadyuva para que participe sin cortapisas en la política, desde el púlpito, cuando el PRD reivindica la separación de lo civil con lo religioso? ¿Cómo abordar la inseguridad cuando el PAN piensa y cree que el crimen organizado debe enfrentarse a sangre y fuego, incrementando el presupuesto para la compra de armas y poniendo al Ejército en las calles y el PRD mantiene la perspectiva de que los recursos deben ser para invertir en la mejora de los servicios de salud, educación, ampliar el abanico de oportunidades para los jóvenes, las mujeres y sectores marginados, así como la creación de fuentes de empleo y el desarrollo de la planta productiva?
¿Cómo ponerse de acuerdo respecto a los temas del aborto, el control de la reproducción y diversidad sexual, en donde el PAN los asume como pecados o enfermedades, mientras que el PRD las comprende como derechos del hombre y la mujer, o derechos naturales del ciudadano para decidir por sí mismo? ¿Cómo estar de acuerdo acerca del manejo de nuestros recursos naturales y energéticos, pues mientras los panistas los consideran como fuentes de riquezas para unos cuantos, sean empresarios nacionales e internacionales y cuyo objetivo es explotarlos irracionalmente, y los perredistas mantenemos que son patrimonio del estado, y por lo tanto deben explotarse racionalmente en beneficio de la nación como país independiente?
¿Cómo gobernar un país, un estado o un municipio entre ambos partidos con estas contradicciones, donde además los panistas son defensores a ultranza de la economía de mercado, pero de los grandes capitales, y los perredistas pretendemos que se genere una política pública a favor de las mayorías, incluyendo en esto a empresarios comprometidos con nuestra patria?
Nosotros advertimos en el Consejo Estatal del 21 de marzo que rechazábamos rotundamente esas alianzas con el PAN e incluso con el PRI; por ello, nuestros consejeros apoyaron el punto de acuerdo propuesto por la compañera Selene Vázquez Alatorre y respaldamos la posición política planteada por la compañera Fabiola Alanís Sámano de hacerle un llamado a la dirección nacional a que rectifiquen esa posición aliancista, que va en contra de nuestros principios. No fue una posición personal, sino política de todos los perredistas y consejeros de Michoacán.
Por lo tanto, los comentarios “insanos” y no institucionales de Jesús Zambrano en contra de Fabiola Alanís Sámano muestran un desprecio a nuestras instancias estatales, a la militancia de Michoacán y una total falta de respeto a la lucha de años que hemos dado en contra del PRI y ahora en contra del PAN, que durante los dos años que Leonel Godoy Rangel lleva de mandato han mostrado su total desprecio al Ejecutivo estatal y a nuestro propio partido.
Los dirigentes están obligados a pugnar por la unidad y cualquier indicio de división surgida por ellos, los militantes estamos obligados a exigirles que rectifiquen, como ya lo hizo el Consejo Estatal en Michoacán, o en su caso, debemos pugnar por que renuncien, pues ya no estarían representando ni a nuestro proyecto, ni a la herencia histórica que tenemos como instituto de izquierda.
Debemos impedir que se use en nuestro nombre alianzas y proyectos que van en contra del pueblo. El PRD es de miles, millones de hombres y mujeres de izquierda, que desde la escuela, la fábrica, las calles, el campo y las ciudades, hemos luchado con creces y hemos sufrido bastante por transformar a nuestro país durante décadas. En Michoacán, la democracia y las libertades nos han costado sangre y luchando es como hemos avanzado. Nunca hemos estado en la penumbra o tras bambalinas, estimado Jesús Zambrano; por ello, la calidad moral no está en entredicho.
Llamamos a Jesús Ortega y Jesús Zambrano, si son demócratas, a que expliquen en un pleno del Consejo Estatal de Michoacán sus sustentos políticos para esas alianzas y nos muestren que su posición es la correcta y no usen los medios de comunicación para denostar a los perredistas del estado. Que respeten su jerarquía y la institucionalidad respetando a nuestros órganos estatales y dirigentes de Michoacán. No negamos que aquí tenemos diferencias en el estado, pero no somos ingenuos, porque sí ubicamos perfectamente quiénes son los enemigos de la democracia y de las libertades políticas no sólo del estado, sino de todo el país. Desde la cuna del perredismo, llamamos a cerrar filas para continuar en la lucha por la democracia, la soberanía y las libertades e impedir que nuestro partido lo sigan llevando al despeñadero al aliarse con nuestros “verdugos” históricos. Nosotros le decimos al Consejo Estatal, al Comité Ejecutivo Estatal y a la presidenta Fabiola Alanís Sámano, que tienen nuestro apoyo y no los vamos a dejar solos.
Atentamente: Julio César Andrade, Gonzalo Ayala, María Dolores González, Francisco Zamudio, Miguel Soto, Andrés Hernández, Pablo Ballesteros, José Luis Martínez Tapia, Roberto Zamudio, Gabriel Hernández, Soledad Jacobo Pintor, Florencio Tapia, Marco Antonio Arguello, Teresa Martínez Tapia, Sebastián Silva, Ramón Zirate, Rogelio Advincola, R. Francisco Duarte, María Elena Villaseñor, J. Guadalupe Sosa, Amador Parra, Crispín Vázquez, Benjamín Dueñas, Antonio Avilés, Jorge Valles, Jorge Luis Mora Pérez, Oceanía Hernández, Jerónimo Gutiérrez, Efraín Orozco Nieves, Alejandro Moreno, Betania Morales, Julia Martínez, Margarita Jazmín Reyes, Mariano Mora, Bertha Alisia Ambriz, Pedro Hernández, Miguel Ángel García, Claudia Hernández, Benjamín García, Teresa Meza Salazar, Salomón Meza Gutiérrez, Sandra Alonso González, Guadalupe Sánchez Ibarra, Fabiola Meza Salazar, Evangelina Zavala Mosqueda, Eliazar Ayala, Verónica Meza Morales, Josefina Soria Ayala, Consuelo Morales Hernández, Deysi Rosario Zamora Meza, María Guadalupe Meza Gutiérrez, José Antonio Zarate Alonso, Mary Cruz Meza López, Jorge Soria Ayala, Norma Venegas Contreras, Esteban Ayala Zamora, Leticia Núñez Reyes, Rosa Amelia Morales, Claudia Ivón Ceballos, José Alberto Chávez Gutiérrez, Silvia Verónica Aguirre Ceja, María de Jesús Morales Bermúdez, María Isabel Alcántar Jaramillo, José Gerardo Rodríguez, María Enedina Aguilar Banda, Elisa Gutiérrez García, Juana Ríos Martínez, Rosalía Juárez Vázquez, Hernestina Zamarripa, Rosalba Godínez Juárez, Diego Ramírez Solís, Agustina Delgado Mares, Josefa Esparza Segobiano, Griselda Ortiz Zamarripa, María Guadalupe Canales Mejía, Yolanda Arroyo Godínez, Rosa María Gallegos Raya, Estela Mejía Gaytán, Manuel Salvador Godínez Gallegos, María del Carmen Juárez Lugo, Sergio Antonio Mata Rodríguez, Verónica García Castañeda, María Elena Rivera Ávila, Graciela Uribe Razo, José Antonio Contreras Hernández, María Teresa Hernández García, María de la Luz Lugo Rodríguez, Selene Hernández Velázquez, Héctor Canales Mejía, Martha Elena Muñiz Fontanel, Blanca Estela Uribe Estrada, Julia Cruz, Roberto Juárez Cruz, Miguel Solís, José Gerardo Cervantes, Lidia Olivares, María Magdalena Hernández Barreto, Simón Alvarado García, María Adela Barreto, Alama Aurora Muñoz, Ignacio Muñoz Arroyo, Margarita Godínez Ávila, Silvia Guerrero Vázquez, Mario Muñoz Pérez, Ofelia Cervantes, Josefina Agavo Ríos, Federico González Corrales y Francisco Rodríguez Juárez. Responsable de la publicación: Licenciado Filiberto Gutiérrez Moreno.